La basura que se genera de los empaques y envases de productos, especialmente comestibles, carentes de todo valor nutricional y en extremo calóricos, es la materia prima con la cual el artista plástico Pablo Llana da forma y textura a la exposición plástica “CRAP. INC.”, que desde anoche se presenta en la Galería Secreta, un espacio en el barrio de Santiago que podrá visitarse hasta principios de enero. Una veintena de obras, entre cuadros, fotografías, instalaciones y piezas tridimensionales, llenan este espacio con el trabajo del tijuanense de 42 años de edad, que para llevarlo al cabo ha sustituido el uso de pinturas y pinceles por los colores característicos de envolturas y productos diversos para generar sus creaciones. En sus piezas es notorio que insiste en denunciar la morbidez y la mortalidad como consecuencia del consumo de productos chatarra, así como las actitudes de “colonización”, incluso autoimpuestas, que amplio sector de la población tiene ante el capitalismo, con énfasis en el estadounidense. Entre estos temas ha retomado en fechas recientes la advertencia ante al enorme riesgo que supone la ingesta de hamburguesas. Emocionado por presentarse por primera vez en Mérida, Pablo Llana definió hace 13 años sus marcos referenciales y ahora ahonda en las temáticas que le interesan. La exposición está conformada por obras que ha creado desde 2009. Su materia prima: envolturas y etiquetas de dulces, botanas, bebidas y alimentos procesados, tanto de empresas transnacionales como mexicanas, y que se consumen en cantidades descomunales en la zona fronteriza de México y Estados Unidos. No se trata de collages en los cuales los elementos crean composiciones abstractas, sino que el manejo de Llana de cada elemento logra una composición definida que sumerge al espectador en la reflexión de la obesidad. En “CRAP, INC.”, el tijuanense se inscribe en los estilos conceptual y pop de la fase posvanguardista de la historia del arte y apuesta por recobrar la utilidad social del arte. Para asistir a la Galería Secreta y ver la exposición de manera gratuita hay que hacer cita al 9991-63-31-14. Sus responsables advierten que el sitio es “tan secreto” que no se puede revelar su ubicación, más que decir que se encuentra en el barrio de Santiago. Fuente: Diario de Yucatán.